Lo Pigal Casa Kiko Llessui

Restaurante Lo Pigal Casa Kiko. Cocina catalana tradicional en Llessui, Pallars Sobirà

• Nivel Yummy: **** / *****
• Precio: €€
• Dirección: Carrer Llessui Poble 1, Llessui, Lleida
• Cómo Llegar: En coche
• Teléfono: +34973621715
• Servicio: En restaurante

Hace poco estuve visitando la comarca del Pallars Sobirà (Lleida) con mi familia. Nuestra primera parada fue la localidad de LLessui, muy cerquita de Sort. Fuimos únicamente a almorzar y dar una vuelta por el centro del pueblo. Vale la pena acercarse con el coche, ya que es una zona muy bonita.

El único restaurante de Llessui es Lo Pigal Casa Kiko (creo jaja). Muy conocido por su propuesta de cocina catalana y sus embutidos catalanes a precios económicos, sin obviar la calidad de sus platos y el servicio que ofrecen. Fuimos expresamente a comer a este restaurante de camino a Saurí (una pequeña aldea donde nos hospedábamos).

Casa Kiko “El Pigal” es un restaurante familiar, abierto en 1985 por Francisco Rafael y Maria Prat. Durante más de treinta años han pasado muchos comensales por su restaurante, que han podido disfrutar de una cocina tradicional catalana, con productos estacionales y de la zona, con una presentación actual y moderna. Actualmente, sus hijos Blanca e Ivan Rafael son los que se ocupan de hacer su visita confortable, agradable y única.

Aparte de restauradores son carniceros, así que podrás comprar su carne (ternera, cerdo, cabrito, vassiva, cordero, buey, burro, caballo, salchichón …), paté, embutidos (girella, relleno de carnaval, xolis, secallona…) y otras elaboraciones caseras a un precio-calidad excepcional.

La terraza del restaurante Lo Pigal Casa Kiko cuenta con unas vistas fantásticas al Valle de Àssua, dentro hay un comedor en la entrada y otro amplio espacio repleto de mesas con todo tipo de capacidades. Nosotros tuvimos la suerte de tener una bonita mesa redonda en la esquina del restaurante, nadie nos molestó y estuvimos super bien.

Carta y Menú del restaurante Lo Pigal Casa Kiko en Llessui: Precios y Platos

Como hemos comentado, la carta del restaurante Lo Pigal Casa Kiko se basa en recetas de cocina catalana, productos de proximidad y de temporada. Sus especialidades son los entrantes (paté, ajo y aceite de membrillo, xolis, secallona, queso), hortalizas del huerto, carnes del Pirineo y guisos de montaña.

Entre su carta podemos encontrar platos como el Chuletón de ternera o potro, Bacalao en sanfaina, Magret de pato con salsa de frutas del bosque, Rabo de buey, Pies de cerdo con ajo y perejil, Estofado de Gamo, etc.  Entre los postres más pedidos ofrecen el Filiberto (yogur de la casa, con un corte de helado de nata y grosella), la Roca Escalentada (corte de nata con merengue flambeado con whisky) y el Flan de la casa. También ofrecen sugerencias como el entrecot a la piedra (durante nuestra visita) y otras deliciosas propuestas.

Almuerzo en el restaurante Lo Pigal Casa Kiko, Valle de Àssua

Para beber pedimos dos vinos, un blanco de la casa Neret embotellado por Vila Corona en Vilamitjana, Pallars Jussà (Lleida). Algo peleón, pero aceptable si se sirve fresquito, como era el caso.

También un vino tinto, de la casa y a granel, que no tenía ni nombre y lo único que sabíamos es que estaba elaborado en la Conca del Tremp, una de las tres “conques o cuencas” que formen el Pallars Jussà, además de la Vall Fosca. Desde el año 1998 la Conca de Tremp está integrada dentro de la DO Costers del Segre, con la denominación de Subzona Pallars. Actualmente hay diez bodegas que producen y comercializan su vino (la mayoría integradas dentro de DO).

Nos sentamos a la mesa y revisamos la carta. Dos personas pidieron para compartir los Entrantes de la casa: Paté, all i oli de membrillo, xolís, secallona y queso de oveja. Comentaros que el xolís es el salchichón de toda la vida, pero elaborado con ellos y muy rico. El precio de los entrantes es de 10,00€ por persona (nosotros pedimos solo 1 ración para compartir entre dos personas).

Un servidor y mi padre pedimos la Vianda. Escudella con col y otras verduras como zanahorias cocidas acompañadas de pasta, garbanzos y ración de bull blanc y morcilla negra. Venía servido en una sopera para que cada uno se sirviera lo que quisiera.

Estaba deliciosa y con el frío nos encontró genial. Este ramen catalán vale la pena descubrirlo si visitas la comarca. Una vez servido mi plato repetí otra vez. El precio de este plato es de 6,70€. 

Canelones de carne gratinados. Un clásico que nunca falla y que estaban deliciosos. Venían tres unidades y los elaboran ellos mismos. El precio esta muy bien, 8,70€ el plato.

Dos personas de nuestra mesa pidieron la Paletilla de cordero al horno. Acertaron sin duda, si lo sé me lo hubiera pedido. La paletilla venía acompañada de una salsa de su propio jugo, dos rodajas de calabacín y un brócoli. Creo que el acompañamiento se quedó corto para esta paletilla. 

Mi madre se pidió la Pierna de cabrito rellena de setas. Otro acierto de plato, la pierna de cabrito era jugosa, acompañada de un sencillo jugo y otra pobre acompañamiento de dos rodajas de calabacín. 

Yo pedí el Palpís. Pierna de cordero guisada. Nada más ver el plato supe que iba a pasar hambre. Tres rodajas de una pierna de cordero perfectamente guisada, en su interior había verduras y ajo. Pedí como acompañamiento una ración de patatas fritas que llegaron al momento. El Palpís estaba delicioso, la carne superjugosa y tierna. Un plato de 10 en cuanto a la carne, su calidad y sabor.

Postres, pedimos su famoso Filiberto que llevaba yogur, nata helada y grosella. Un refrescante final a un excelente almuerzo.

Mi cuñado pidió la Roca Escalentada, un corte de nata con merengue flambeado con whisky. Un plato muy típico de la zona.

Experiencia en el restaurante Lo Pigal Casa Kiko, el Pallars Sobirà a la mesa

Pues nuestro arranque por el Pallars Sobirà comenzó muy satisfactoriamente gracias al restaurante Lo Pigal Casa Kiko. Recomiendo visitarlo para darse un homenaje gastronómico de cocina catalana de montaña. También os recomiendo visitar la pequeña aldea y hacer fotos. Tal vez los acompañamientos de los platos son mejorables, pero todo se arregla con una ración de patatas fritas, verduritas, etc. No tendrás problema teniendo en cuenta el precio tan ajustado de cada plato (hubiera pagado 5 euros más por cada uno de ellos, especialmente los de carne).

Las vistas son todo un reclamo para visitar Llessui, pero también la gastronomía de un restaurante con un equipo y cocina que ofrece lo mejor de sí mismo. El personal tiene una sonrisa en la cara, es joven y sabe tratar a la clientela. Como he comentado al principio, no son solo un restaurante también son carniceros. La materia prima hace de este restaurante un punto de parada indispensable si visitas la comarca del Pallars Sobirà.

Después de comer fuimos a la casa rural que habíamos alquilado en la localidad de Saurí. Madre mía lo bonito que era, me encantó la casa, el entorno, las calles de piedra y los vecinos locales que vieron aterrizar a una familia entera.

Vistas desde la casa rural de Saurí por la mañana a primera hora. Las montañas cubiertas de nubes y el cielo triste. Llovió horas más tarde, pero fue una gozada estar dentro de la casa.

A la tarde fuimos a visitar el pueblo de Gerri de la Sal. Una localidad con un precioso puente y río con unas vistas de las montañas fabulosas. Os dejo la imagen del río Noguera Pallaresa que pasa por el pueblo.

También estuvimos visitando su Monasterio de Santa Maria de Gerri, que vale la pena la visita. Y con esto ya termino este artículo. Espero que os haya gustado nuestra experiencia ¡Super Yummy!